EUROBASKET 2015
Lituania, último desafío antes del oro (Telecinco - 19:00 h)
9/19/2015 - 6:36 PM
El equipo báltico presenta una trayectoria similar a la de España en el EuroBasket tras haber cedido en la fase de grupos y haber crecido desde el sufrimiento y el trabajo en equipo. El pívot Jonas Valanciunas es el referente de un grupo que ha dejado por el camino a Georgia, Italia y Serbia.
PACO RABADÁN / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
La maldición del invicto continuará un EuroBasket más vigente -desde 2003 es así- tras las derrotas de Francia y Serbia en las semifinales del EuroBasket. España y Lituania se presentan en la final con, al menos, un traspié que les ha hecho crecerse como conjunto a lo largo del campeonato. Los nuestros activaron el modo final desde la tercera jornada del campeonato, cuando una derrota ante Italia no permitía más márgenes de error. A Lituania le ocurrió algo similar cuando sorprendentemente cayó con Bélgica y al día siguiente ganó sólo por dos puntos a la cenicienta Estonia. En su último día en la fase de grupos tuvo que jugar una prórroga para doblegar a la República Checa.
Si hay algo que caracteriza al conjunto báltico es su enorme templanza a la hora de disputar los encuentros apretados. Cinco encuentros los ha ganado por cuatro menos puntos de margen y otro de ellos –el de cuartos- se tuvo que ir a la prórroga. El principal peligro es que son un bloque sin fisuras. Juegan fuerte al poste, tienen grandes tiradores y físicamente son uno de los equipos que más mates registra del campeonato.
Jonas Valanciunas lidera al equipo con unos grandilocuentes 16,9 puntos y 8.3 rebotes en 27 minutos por partido. Maciulis, que ha llegado a valorar 50 en un encuentro, es el jugador que más minutos promedio con 31,1 y es el comodín puesto que puede jugar al puesto o abierto. Su 59% de acierto desde la línea de tres y sus 14,5 puntos hablan de la calidad de su torneo. No hay que obviar el poderío ofensivo de un equipo que eleva su promedio anotar a los 75,9 puntos por encuentro.
El punto débil de Lituania es una de las fortalezas en las que ha crecido España en los últimos partidos: las pérdidas de balón. Con 14 por encuentro, los lituanos ofrecen una laguna para que los nuestros puedan jugar corriendo, como más les gusta, como atestiguan los 85,1 puntos por cita de los de Scariolo.
España, que se presenta con un Pau Gasol pletórico -25,6 puntos y 8,4 rebotes-, espera certificar un campeonato en el que su capacidad de sufrimiento y entrega le ha llevado a encontrar la forma de superar barreras y obstáculos impensables para muchos como ganar a Francia ante su público.