LOS LUNES DEL PRESIDENTE
Felices 90
7/6/2015 - 2:32 PM
Este jueves cumple los 90, y bien podrá hacerlo presumiendo de prácticamente toda una vida dedicada al baloncesto, de forma especial a la gestión internacional desde su despacho en la FIBA.
POR JOSÉ LUIS SÁEZ
Desde que en 1976 accedió al cargo de secretario general, Boris Stankovic ha sido sin lugar a dudas la personalidad más decisiva en el desarrollo y crecimiento de nuestro deporte en todo el mundo. Un desarrollo que ha sido global, algo difícilmente imaginable hace 40 años, y un crecimiento certificado en unos 500 millones de practicantes que han convertido el baloncesto en un deporte de alcance universal.
Como muchos altos dirigentes del deporte, Stankovic dio sus primeros pasos en vestido de corto. Y en este sentido hace poco más de un año, en febrero de 2014 en Barcelona, tuvimos la oportunidad de hacerle partícipe del homenaje a los supervivientes del primer Mundial de la historia, el disputado en 1950 en Buenos Aires, en el que lució la camiseta de Yugoslavia como joven jugador internacional.
Pero la dimensión que alcanzó su gestión en la FIBA, en todo momento en armonía con sus presidentes, se podía haber intuido en su propio carácter abierto al mundo y a las ideas. Ya como entrenador fue un pionero en su país, aceptando retos profesionales más allá de las fronteras de su época. Y esa capacidad para adaptarse a culturas diversas, a entender todas y cada una de las perspectivas, fue la que marcó su histórica trayectoria como secretario general.
A lo largo de esa larga, intensa y apasionante carrera, en la que vivió entre otras circunstancias lo más álgido de la historia de la Guerra Fría, esa capacidad, y su espectacular don de lenguas, le permitió alcanzar una extraordinaria visión de futuro. Imposible señalar una única gestión, pero desde luego para la Historia del Baloncesto queda el acuerdo con la NBA impulsado a finales de los pasados años 80, que cambió por completo el panorama de nuestro deporte.
Pero nada sucede por casualidad. Y si el baloncesto ha llegado a ser lo que es en la actualidad, ha sido en gran medida porque Stankovic ha sido –y probablemente sigue siendo- el hombre que mejor conoce el baloncesto hasta el último rincón de los cinco continentes, que ha visitado de forma incansable desde que en 1960 se convirtió en el hombre de confianza de William Jones. Un conocimiento que desde hace ya unos años ha ido traspasando, con tanta profesionalidad como generosidad, a su sucesor, Patrick Baumann, quien ha tenido en él, como lo tenemos todos, un verdadero ejemplo. Un ejemplo que nos sigue dando no sólo en el día a día sino también con sus aportaciones en cuantas comisiones participa. Porque Boris Stankovic no se ha retirado, está tan activo como siempre.
Desde estas líneas, desde España y en nombre de todo el Baloncesto Español al que represento como presidente de la FEB, le quiero hacer llegar este sencillo mensaje:
Felices 90, Maestro Stankovic.