A punto estuvo de dar la sorpresa el conjunto melillense en el primer partido de la serie disputado el pasado viernes en Ourense. Un encuentro del que Alcoba cree que hay que sacar muchas conclusiones, especialmente las positivas, de cara a este segundo encuentro que se disputa mañana en Melilla: “Hay que sacar las mejores conclusiones del partido del viernes y sobre todo saber cuales fueron nuestros errores. No podemos competir con un equipo como Ourense cometiendo 29 pérdidas de balón. Pero hay que quedarse con los positivo y entre ello es que fuimos capaces de competir ante un gran equipo y darle la vuelta al marcador cuando íbamos 18 puntos abajo. A pesar de la derrota el primer partido ha sido un refuerzo positivo para el partido de mañana”.

Una cita que el conjunto melillense ha preparado en apenas dos días y donde el trabajo ha estado enfocado a la corrección de pequeños detalles tácticos como según comenta el técnico azulino: “Estos dos días de preparación sirven para ajustar un par de detalles y corregir algunos errores que cometimos. Ahora no sirve de nada trabajar físico y tampoco la motivación porque esta plantilla la tiene y está con unas ganas terribles de quitarse la espina del viernes”.

En cuanto a su equipo confirma que contará con todos para el trascendental encuentro de mañana, algo que califica de muy importante en este tipo de eliminatorias: “Garrido llegó con un tobillo lesionado y Gatell también llegó con molestias, aunque ambos hicieron un gran trabajo. Por suerte ahora seguimos teniendo los once jugadores disponibles y esto es algo muy importante en una serie tan corta y donde tienes que tener muchas rotaciones”.

Por último quiso dirigirse a la afición melillense y les animó a que acudan en masa mañana al Javier Imbroda porque para él, ahora más que nunca, todos deben ir a una: “El equipo ha demostrado que tiene mentalidad de equipo campeón y que quiere más. Mañana es un partido crucial y necesitamos el apoyo de la afición. Sabemos que es un día complicado, un martes por la noche, pero les necesitamos. Necesitamos sentir su aliento y sobre todo la fuerza que nos dan cuando las cosas van mal. Si el martes estamos solos esto no tendrá ningún sentido aunque estoy confiado porque la afición ha respondido siempre. Tenemos que ser un equipo en el amplio sentido de la palabra”.