CARMELO GUTIÉRREZ / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Su grave lesión de rodilla en marzo de 2012 marcó las dos primeras temporadas de Ricky Rubio en la NBA. Su año ‘rookie’ quedó cercenado cuando faltaba un tercio de partidos para completar la campaña del ‘lockout’. Y la recuperación de su percance le hizo perderse más de una veintena de encuentros del siguiente curso.

Pero en su tercer año en la mejor liga del mundo, Ricky Rubio ha conseguido culminar una temporada completa de principio a fin. 82 partidos disputados, 82 encuentros saliendo como titular. Por fin, una campaña sin percances para el base internacional.

En el apartado individual, Ricky Rubio ha tenido caras y cruces en los registros que había desarrollado en sus dos primeros años de carrera. Por primera vez en su trayectoria NBA, el base de El Masnou ha bajado de los diez puntos de anotación (9.5), como consecuencia de la merma en sus lanzamientos a canasta. Su porcentaje de tiro ha mejorado (38,1%), pero sigue siendo una ‘tara’ en su juego, que le impide convertirse en una verdadera amenaza desde el perímetro.

El ligero retroceso en el apartado anotador (también motivado por la presencia de Kevin Love y Kevin Martin) lo ha compensado con una mayor ‘generosidad’ de cara a sus compañeros, firmando su mejor registro en asistencias (8.5). Y en defensa, Ricky Rubio ha comandado durante gran parte de la temporada la clasificación al mejor ‘ladrón’ de la liga (2.32). Un premio que al final ha recaído en Chris Paul.

En el apartado colectivo, ha vuelto a ser una temporada ‘mediocre’ para los Timberwolves, que se han vuelto a quedar fuera del playoff por novena campaña consecutiva, pese a las grandes expectativas puestas a principio de temporada. Minnesota siempre ha estado un peldaño por debajo del nivel necesario para estar entre los ocho mejores del Oeste y se quedaron sin opciones reales cuando restaba más de un mes para acabar la temporada. Como ‘triste consuelo’, queda el hecho de haber firmado la mejor temporada desde 2006, quedándose a una sola victoria de alcanzar el 50% de triunfos (40-42).

De cara al futuro, Ricky Rubio cuenta con año más de contrato y la posibilidad de otro más. En Minnesota se está hablando de la posibilidad de sustituir a Rick Adelman tras tres temporadas sin playoff. Y se teme la posible marcha de su jugador franquicia, Kevin Love, que el 30 de junio de 2015 podría convertirse en agente libre.